2015-06-25

El 26 de junio de 1990 los miembros de ETA Susana Arregi y Jon Lizarralde fueron encontrados muertos, y German Rubenach gravemente herido, en la foz de Irunberri, tomada por un descomunal despliegue policial. 25 años después, los pueblos natales de los tres militantes -Oñati, Andoain e Iruñea- son escenario estos días de diversas iniciativas dirigidas al esclarecimiento de los hechos y al conocimiento de la verdad de lo que allí sucedió. Txemi Gorostiza, abogado que se encargó del caso, y el propio Germán Rubenach, ofrecieron este jueves una charla en la kultur etxea de Oñati, para preguntarse "¿Qué pasó en Irunberri?".

 

La charla organizada por Euskal Memoria de Oñati tuvo como objetivo ofrecer datos sobre lo sucedido en Irunberri, y para ello Txemi Gorostiza desgranó varias evidencias y datos objetivos que cuestionan las versiones oficiales (que fueron hasta tres diferentes), siempre desde una perspectiva positiva y de futuro: "Debemos denunciar lo que pasó, para conocer la verdad. Desde la esperanza, dando pasos hacia adelante, sin estancarnos".

El abogado navarro situó lo sucedido en el contexto del conflicto político en la década de los 90, del cual subrayó el elemento de la impunidad. Del mismo modo, ofreció varios datos objetivos del caso que se contraponen con las versiones oficiales (el suicidio de los dos militantes de ETA, o que Rubenach hubiese disparado a Susana Arregi...). ¿Cómo fue posible que en una zona que desde el mediodía del 25 de Junio estaba ocupada por un amplísimo dispositivo de la Guardia Civil -54 patrol, lanchas en el río, perros adiestrados, patrullas, agentes de paisano, GAR...- no encontraran los cuerpos de Lizarralde y Arregi hasta la mañana siguiente? Según la autopsia oficial, Jon Lizarralde murió ahogado en las aguas del río Irati, pero persisten las dudas sobre si ya estaba muerto previamente, ya que tenía un disparo en la cabeza. Susana Arregi era diestra, pero los dos tiros que presentaba en su cabeza le entraron por su lado izquierdo (a consecuencia de estos datos, cambiaron la versión oficial para hacer responsable a Rubenach). ¿Cómo fue posible que los días y semanas siguientes a estos sucesos fueran detenidas numerosas personas en Nafarroa, y otras tantas pudieran huír, si no encontraron ninguna información entre las pertenencias de los militantes muertos?. Mientras Germán estuvo ingresado en el Hospital fueron constantes los graves intentos de control, engaño y manipulación por parte de policías de paisano. Además las líneas de investigación fueron interrumpidas... Interrogantes y contradicciones, que Gorostiza quiso entrelazar con una petición: "Que lo sucedido en Irunberri también sea aclarado y reconocido. El recuerdo y la reparación son necesarios también desde las instituciones".

Esclarecimiento e impunidad

Por su parte Germán Rubenach, que todavía padece varias de las graves consecuencias por los tiros recibidos aquel 25 de junio, reclamó que se esclarezcan los hechos. "Es necesario terminar con la impunidad, para que no vuelvan a repetirse hechos similares".

Para más información sobre Susana Arregi y Jon Lizarralde, se puede consultar el Centro de Documentación de Euskal Memoria.

• 
•